sábado, 27 de julio de 2013

El Semeruco... NaGuará!


Flor del Semeruco
Es un árbol autóctono del Estado Lara, declarado como emblemático y símbolo vegetal de la región larense. Se dice que en tiempos de la Colonia; el Obispo Bastidas informó haber encontrado el "cimiruco" o cereza sin Hueso. Bartolome de las Casas dice haberlo visto en Santo Domingo; Bernabe Cobo lo reporta en Lima, Perú. Siendo el Semeruco cultivado desde la edad precolombina su origen verdadero no ha sido bien establecido, aunque se le ubica como nativo del área del Caribe. Según informe del siglo XVIII el Semeruco es nativo de El Tocuyo Estado Lara. 

El poeta José Parra Pineda (1858-1905) le canta al Semeruco : “Nace en las pampas de mi tierra amada / entre flores azules y bejuco, / grano de oro y de púrpura animada / ese fruto silvestre: el semeruco”.





También el cantante popular Alí Primera quien le obsequia una estrofa de su canción mansa para un pueblo bravo: vuelve a tu canto de turpial/llena de gritos el cardonal/que hay semerucos allá en el cerro/ y un canto hermoso para cantar/ que hay semerucos allá en el cerro/ y ya la gente empezó a sembrar.


En nuestra gran literatura venezolana ha sido exaltado el fruto por el cuentista tocuyano Julio Garmendia, quien dijo que la vida es como la fruta del semeruco, esto es, agria y dulce.

El cantante Gualberto Ibarreto le canta una bella canción compuesta por Luis Mariano Rivera que dice así: cerecita de mi monte/ silvestre frutica mía. A pesar de que eres buena y de sabor exquisito/ nadie siembra tu semilla/ nadie riega tu arbolito (…) Semeruca a tí te llaman en las tierras de Occidente/ cerecita te llamamos en nuestra tierra de Oriente.



El gran pero pequeño Semeruco es rico en vitamina C (contiene alrededor de 1.600 miligramos por cada 100 gramos de la fruta), es considerado un excelente antioxidante y fortificador del sistema inmunitario. Su consumo también ayuda a tratar  resfriados, dolores de garganta y trastornos hepáticos.

Su aporte de vitamina A, tiamina, riboflavina y niacina, y de minerales como hierro, calcio y fósforo contribuye a mantener la salud de la piel, los huesos, el corazón y el aparato digestivo. Además, la fruta tiene propiedades antiinflamatorias y diuréticas.Se recomienda moderar su consumo en personas que sufren problemas renales o gota, pues la alta cantidad de vitamina C que contiene el semeruco podría provocar la formación de cálculos de oxalato e incrementar los niveles de ácido úrico en el organismo.


Por su color rojo intenso al madurar, el semeruco se asemeja a la cereza. Mide alrededor de 2 centímetros de diámetro, pesa entre 3 y 5 gramos y crece en racimos de hasta cinco frutos. Su cáscara es lisa, brillante y frágil, y su pulpa es carnosa y ligeramente ácida, con tres semillas en su interior.Cada 100 gramos de semeruco aportan 32 calorías, y entre 0,6 y 1,2 gramos de fibra; de ahí que se recomiende su ingesta en regímenes dietéticos.


En la cocina

• Al momento de seleccionarlos, se sugiere preferir 

los frutos con la piel lisa, sin imperfecciones.
• La fruta puede conservarse en el refrigerador durante 
tres días, aproximadamente. para mantenerla en buen 
estado por más tiempo hasta por seis semanas, 
se recomienda congelarla.
• Apreciado por su singular sabor entre dulce 
y ácido, el semeruco es utilizado para elaborar jugos, 
mermeladas, jarabes, compotas, helados y dulces.